Mi lista de blogs

lunes, 1 de julio de 2013

ODIO SER EL TONTO QUE TE HACE LLORAR

Tal parece que, cuando hablábamos de socialismo, era para fundirnos en el colectivo. Después de todo, el socialismo era colectivo y había incluso quien le decía "colectivismo" a la cosa nuestra.
     No nos hemos movido demasiado. Nos pusimos a hablar de democracia, porque todos y todas somos demócratas. ¿Quién no? Si acaso, una minoría autoritaria, los dinosaurios. Ser demócrata o descubrirse demócrata es otra manera de fundirse en el colectivo. Hoy, el mundo es democrático. Si el colectivo va al socialismo, vamos. Si va a la democracia, vamos. Aunque en el pasado no nos haya interesado la democracia, ni siquiera la representativa, ni hayamos practicado la democracia en actos personales.
    Para que no haya duda, nosotros estamos con la sociedad y en la sociedad (si "civil", mejor). ¿Qué hay de más colectivo que la sociedad? Vamos con ella: si tiene nuevas demandas, la seguimos, y si hay nuevos actores, también. Estamos fundidos con la sociedad. La cosa nuestra es parte de la sociedad. Es más colectiva que la democracia, aunque ya andábamos felices con las "grandes mayorías". Un buen día tuvimos la fortuna de recuperar la vista: bueno, la verdad es que ya éramos mayoría cuando todos queríamos "ese" progreso, y ahora, pues seguimos siendo mayoría, el todo.
    Nosotros queremos ser incluyentes: queremos oportunidades para todos, que no falte ni uno en el Uno, que estemos todos en la cosa nuestra, que es la de todos y todas, de cada uno y de cada una. Estamos hoy por hoy en la máxima colectividad: Big Mother.
    No nos importa si el capitalismo es humano o no. Nos importa estar donde está el montón. Tener las manos en la masa. Y que la masa alcance para todos y todas. Que nos fundamos todos en la gran fiesta del reparto. Que es como por cierto entendíamos el socialismo cuando la colectividad iba al socialismo. Que se repartiera. Como sea, pero que se repartiera. Siempre pedimos más (como el capitalismo): más opciones tecnológicas, más satisfacción de nuestras demandas, más oportunidades, más y más...
     Nuestro pensador de cabecera, ése gramsciano con el que pedimos de a montón un reparto a montones, ese pensador se llama Espinoza Paz, y he aquí lo que esperamos del Gran Poder, según nuestro Manifiesto, "Para no perderte":
     Para no perderte
     Dame una lección
     Explícame cómo, en el pizarrón
     Quiero impresionarte con otra actitud
     Por favor atiende mi solicitud
Que al fin y al cabo, soy demócrata, parte de la sociedad civil, de las grandes mayorías y del futuro que todos y todas queremos. Siempre lo fui.

FANÁTICAMENTE MODERADOS

 En varios países de América Latina, la izquierda, que tiende más bien a ubicarse en el centro-izquierda (del que no queda excluida Venezuel...