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sábado, 18 de febrero de 2023

DE NUNCA ACABAR

 Una de las cosas más lindas de los "demócratas liberales", al igual que de los "libertarios" de izquierda, es que se oponen a la represión donde quiera que exista, o casi, porque defienden a la gente y sus "derechos y libertades" contra todo autoritarismo. En esta hermosa perspectiva, cualquier cosa que suceda en las calles es digna de aprobación (o casi cualquier cosa), desde las Primaveras Arabes hasta las Revoluciones de Color, tal vez porque son gloriosas expresiones de "la sociedad civil" contra un Estado casi por definición "malo". En este enfoque, la gente que salió a la calle en Nicaragua en 2018 era "buena", parte de algo así como una feliz "insurrección popular", contra un gobierno "malo", el de Daniel Ortega. Lo bello es que ahora no es la izquierda la que es dueña de las calles, porque no fueron fuerzas de izquierda las que se tomaron calles y carreteras de Nicaragua en 2018. Con el transcurrir de los años se han dado a conocer hechos más precisos, empezando por el de que la instalación de "tranques" (bloqueos) en vías públicas fue obra de delincuentes, en algo planeado con anticipación. La izquierda progresista es incapaz de citar un solo hecho para reconstituir lo ocurrido, aunque deplora lo que ocurre con "nombres" que siguen por lo demás con vida, porque nadie los asaltó. Nadie los quemó vivos en una vivienda ni en una barricada en Masaya (la familia Velázquez en el barrio Carlos Marx, a la que no se pudo ayudar porque el lugar estaba rodeado de “tranques”).

     En los sucesos de 2018 perdieron la vida 253 personas. 48 sandinistas, 22 agentes de policía y 31 miembros de los "opositores autoconvocados". No se explica muy bien cómo el gobierno podría haber matado a 70 de los suyos. Sucede sobre todo que 140 personas murieron en "tranques" a manos de delincuentes..Hay testimonios de que la oposición, en un método ultraconocido, usó francotiradores para disparar al mismo tiempo a manifestantes y policías, para confundir las cosas.. Oficinas gubernamentales fueron quemadas en Granada, Estelí, Masaya, León, Managua, Tipitapa, Diriamba y Chinandega. ¿El gobierno mandó incendiar sus propias oficinas? Se trataría de un gobierno no en uso de sus facultades mentales que habría mandado asesinar a 70 de los suyos (entre militantes y policías) y a incendiar sus propias oficinas. No "peor que Somoza": !peor que Nerón!. Lo más gracioso es que lo dicho habría ocurrido con la policía recluida en sus comisarías, petición de la oposición para el diálogo que Ortega acató. Mientras esto ocurría por varias semanas, fue justamente cuando se colocaron los "tranques". Muchos muertos tenían tiros en la nuca y el cuello. La policía sandinista, conocido ejemplo de policía comunitaria, tira al torso.

     ¿Lloran por Hugo Torres? Este, junto a Moisés Hassan, Luciano García y muy en particular Félix Maradiaga le entregaron dinero para sembrar el caos a Cristian Mendoza, Víper, jefe de pandillas.

     También se utilizaron las noticias típicas de estas "revoluciones", como la del estudiante muerto que nunca existió en la Universidad Centroamericana (UCA) o la "masacre estudiantil" que nunca se produjo en la Universidad Politécnica (UPOLI).

     Las distintas facetas de todo este intento de golpe están descritas por la Alliance for Global Justice en un largo libro: "Nicaragua 2018: ¿levantamiento popular o golpe de Estado?". La palabra de los "demócratas liberales" y de todos los progresistas de izquierda -incapaces de calmar a una mujer, la presidente de Perú, Dina Boluarte- carecen de valor, y son una estafa que tiene, eso sí, el "tino" de parecer colocarse del lado de "la gente" contra "el villano" y "la dictadura", sin que importe que se hayan tratado de actividades delictivas. La delincuencia habla en lenguaje de izquierda. En homenaje al fundador del sandinismo...(da click en el botón de reproducción).













LO QUE HAY QUE TENER (THE RIGHT STUFF)

 La Internacional Progresista (IP) del político Demócrata estadounidense Bernie Sanders se ha tragado a buena parte del progresismo latinoam...