El motivo es sencillo: China comercia con quien se deje y sin reparar mayormente en consideraciones morales. Así las cosas, antes del conflicto actual, China tenía buenas relaciones con Ucrania, al grado de ser su primer socio comercial. Ucrania estuvo ayudando militarmente a los chinos. En estas condiciones, seguramente sea de notar que el presidente y primer payaso ucraniano, Volodímir Zelenski, no se ha lanzado mayormente contra Beijing, capital china. Otros países han sido igualmente cautos ante el conflicto entre Rusia y Ucrania, como India y algunos del Asia central ex soviética. La dizque opinión pública occidental, es decir, la caja de resonancia de los medios de comunicación masiva, se ha cuidado de tensar las relaciones con los chinos.
El periódico del partido comunista local (PCCh), uno entre otros, Global Times, consideró que era necesario "poner un freno de emergencia" a la situación en Ucrania, para lo que pidió un "alto al fuego y negociaciones" que no interesa a ninguna de las partes en conflicto, entre las que se encuentran los "socios y aliados" occidentales, a quienes no les disgustaría desgastar a los rusos o puede incluso que utilizar a Ucrania para provocaciones mayores. El ministerio de Relaciones Exteriores chino ha venido insistiendo en la misma postura y en eternos llamados al "diálogo" que tampoco interesan a las partes, sin que sea comprensible por qué ninguno de los "pacifistas" de ahora hizo nada durante casi una década para orillar a Ucrania a cumplir con los acuerdos de Minsk, cuando todavía era tiempo de que el Donbás permaneciera en territorio ucraniano con estatuto de autonomía. Los chinos han pedido, como máximo, tomar en cuenta las preocupaciones legítimas de seguridad de las partes, pero no han dicho nada preciso sobre el hecho de que la principal parte afectada por el avance de años de la OTAN (Organización para el Tratado del Atlántico Norte) y por lo que se encontró en Ucrania es Rusia. Así pues, China sumó estos llamados a declaraciones anteriores sobre "la soberanía y la integridad territorial", entiéndase que de Ucrania.
No es que China sea tonta, sino que está en la moda pragmática, lo que le impide entender que en todos estos años se llegó hasta amenazar la existencia del Estado ruso. En este marco, Ucrania estaba preparando distintas formas de agresión contra Rusia: bombas nucleares "sucias", patógenos para población eslava en laboratorios biológicos, etcétera, sin olvidar la participación de neonazis ucranianos en la guerra de Chechenia. No está de más señalar, aunque los argumentos rusos para entrar en el Donbás sean endebles si se comparan con el asunto de Kosovo (lo que malamente han hecho las autoridades rusas), que la Federación Rusa no ha invadido Ucrania, cuyo territorio está en gran parte al margen de la contienda, sino el Donbás rusófono, cuyo estatuto en Ucrania estaba en duda. Rusia ni siquiera se ha adentrado en otras regiones rusófonas de Ucrania, trátese de Odessa, Dniépropetrovsk o incluso Járkov. Es de esperar que Occidente no se sirva de toda la Ucrania libre para seguir preparando amenazas no sólo contra el Donbás, sino contra Rusia. No es cuestión de festejar una medida rusa dudosa desde el punto de vista del derecho internacional, pero habría que saber si éste le importa a Occidente, o si se está ante la ley del más fuerte y a la espera de que Rusia termine de demostrar que no lo es: todas las medidas de apoyo a Ucrania en armas en cantidad y financiamiento son contrarias a las reglas de seguridad establecidas legalmente para el continente europeo, tanto más cuanto que, insistamos, no se ha puesto en riesgo al grueso del territorio ucraniano. En este sentido, las reglas de seguridad europea dictan que la seguridad de una parte no puede incrementarse en detrimento de otra.
Una de las cosas que sin duda deban agradecerse más es que ahora Occidente pueda aparecer como un conjunto "antiimperialista", puesto que el "agresor imperialista" es Rusia. A lo máximo que pueden llegar algunas izquierdas, salvo excepciones, es a condenar un supuesto "conflicto interimperialusta", cuando la existencia del Estado ruso está amenazada. ¿O es que está en chino? (da click en el botón de reproducción)
