En una primera visita a Panamá, acompañado de William Walker (de nombre idéntico al filibustero que alguna vez asoló Nicaragua), se le ofreció al militar un avión para viajar a España y dos millones de dólares. Noriega se negó a traicionar a su país y consideró la "oferta" un insulto. Kozak volvió al poco tiempo a solicitar de nuevo que Noriega se fuera de Panamá, como si este país no fuera soberano. Noriega consultó con el Estado Mayor, en medio de meses de negociaciones, y la respuesta fue de nueva cuenta "no". El presidente estadounidense Ronald Reagan había esperado en vano colgarse una medalla con la supuesta "pacificación de Panamá" ante el líder soviético Mijaíl Gorbachov, quien curiosamente había terminado por "reconocer" en América Latina y el Caribe una dizque esfera de influencia de Washington. Noriega escribió a la larga: "no puedo lamentar mi decisión y no me arrepiento de mis acciones. Mi único consuelo es que no entregué a mi país. Al final, el resultado fue el mismo: los americanos impusieron un gobierno y desmantelaron las fuerzas armadas, pero necesitaron un acto de guerra para hacerlo, destrozando el Tratado de Neutralidad y barriendo todo trazo de conducta civilizada".
Algunos analistas han terminado por reconocer que la invasión, hace 30 años, no fue un hecho aislado, sino, entre otras cosas, un "laboratorio" de la futura guerra de Iraq, para ir desmantelando el "síndrome de Vietnam". En Panamá se probaron armas nuevas, desde el avión furtivo Stealth hasta proyectiles dirigidos por láser. Estados Unidos consiguió dejar a los panameños sin ejército y en Panamá se decidió finalmente crear una administración del Canal autónoma (título XIV de la Constitución, "El canal de Panamá"), por lo que no se dió el "uso más colectivo posible" que esperaba el general Omar Torrijos.
El hecho curioso es que hay quienes juzgan "cobarde" la actitud de Noriega al momento de la invasión (las Memorias de Noriega lo desmienten) sin mencionar que la verdadera cobardía estuvo en la agresión militar de la gran súperpotencia del mundo contra el pequeño país caribeño. Han pasado 30 años y aún es de esperar que Panamá se recupere como la rosa de los vientos (da click en el botón de reproducción para oír el tema correspondiente).