El Conserjo de Europa también acusó a la OMS de haberse manejado con poca transparencia en este caso, sobre todo que tenía un comité de emergencia de 16 miembros que eran secretos. En realidad, no lo eran tanto, ya que las farmaceúticas los conocían. El secreto sirvió para que este tipo de nexos no fueran fiscalizados.
Y por cierto que al final, muchos medicamentos se quedaron simple y llanamente almacenados. España, por ejemplo, usó 2 de los 13 millones de vacunas que compró (sólo un 20 % de la población de los grupos de riesgo se vacunó). Lo peor es que la Organización de Naciones Unidas (ONU) justificó que la OMS exagerara el peligro y el organismo de la salud terminó "negándolo todo". En el caso de México, hasta hoy sucede que haya gente -médicos incluidos- que se vacuna contra la influenza y que de todos modos es afectada por unos gripones espectaculares hasta caer en cama, durante la temporada invernal. En otros términos, podría ser que la vacuna, promovida por algunas cadenas de farmacias, no sirva de gran cosa. A reserva de volver sobre el tema, digamos que el manejo alarmista sobre el actual coronavirus ya ha sido asociado con medios de comunicación "globalistas" que buscan tirar las Bolsas de Valores y crearle al presidente estadounidense Donald Trump problemas en pleno año electoral. Mientras tanto, he aquí la nueva forma de saludarse en Wuhan, China: