BUKELE: UN POCO DE SENSATEZ PARA LOS EMPRESARIOS

Ante la nueva crisis económica en la que se está entrando, es muy difícil discernir, a falta de análisis precisos disponibles, entre grupos de empresarios: los hay que han ofrecido ayuda y otros que parecen haber quedado en definitiva ciegos y sordos, y que no conocen otra cosa que la extorsión. Piden de mil y un maneras ("incentivos", "rebajas de impuestos", etcétera) algo que no queda claro si es compensación por pérdidas que ni siquiera siempre tienen (tener menores ganancias no significa forzosamente operar con pérdidas) o simplemente más y más, por principio de acumulación. Como lo demostró el último Foro de Davos, sobre el que habrá ocasión de volver, no hay acuerdo dentro de la clase capitalista sobre el rumbo a tomar, y las cosas están así desde antes de la crisis sanitaria. En el caso de México, algunos grupos empresariales parecen francamente bloqueados o trabados en una visión única de las cosas, el capitalismo spillover (de la derrama). Otros, como Carlos Slim, Alberto Bailléres y curiosamente Germán Larrea han preferido ofrecer apoyo antes que pedirlo.
     Lo más suicida que pueden hacer los empresarios, más allá de los que se ven realmente afectados, es compensar su caída en la ganancia (que, como ya lo dijimos, no quiere decir que estén con pérdidas) con el despido de trabajadores, ya que si se propagara esta actitud (y aún no se sabe si será el caso, aunque hay ya una ola de despedidos sobre todo en Estados Unidos), los despedidos de hoy serían un menor consumo para mañana, y entonces ¿a quién le venderían las empresas que han optado por despedir? En caso de multiplicarse los despidos, algo como quiera latente con la digitalización de tantas cosas, se asomaría el azote de la clase capitalista, la deflación, por la que ya pasó Japón y por la que ha estado pasando la Unión Europea hace algunos años, mientras el fantasma ronda a Estados Unidos desde antes de la llegada de Donald Trump a la presidencia. Cabe señalar que, en el caso de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha criticado a las empresas que se deshacen de trabajadores y la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha señalado que este tipo de empresas será multado. Lo que dejamos en esta ocasión es una interesante reflexión del presidente salvadoreño Nayib Bukele, quien les recuerda a los empresarios que son mortales y que, teniendo dinero para vivir diez, veinte o más vidas, harían bien en preocuparse por la que tienen ahora, en esta Tierra, y por compartir un poco más: estando por ejemplo entubados, lo último de lo que se acordarán es de su cuenta bancaria.Para reflexionar un poco (para nuestros lectores hispanoparlantes en particular).

Y este tuit para la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), sorprendente porque Bukele les recuerda a los empresarios que son los trabajadores quienes los han hecho ricos, cosa que parece haberse olvidado en muchas latitudes: