Mi lista de blogs

lunes, 4 de julio de 2022

NICARAGUA: EL PROGRESISMO NO SE INFORMA

 Una de las cosas sin duda más bonitas -o habría que decir tal vez obscenas- de quienes se consideran "demócratas liberales" es su recuperación del lenguaje de izquierda. Resulta que hoy Ucrania es víctima del "imperialismo" ruso, aunque la palabra "imperialismo", que en principio remite a un concepto, no se usa para describir la acción de Estados Unidos en ninguna parte. Así, resulta que el "imperialismo ruso" se está empantanando en Ucrania debido a la "resistencia", porque ahora son los mismos "demócratas liberales" quienes ven cómo elogiar hasta lo que no existe. No existe tal "resistencia", más allá de los bolsones de neonazis -que no abundan en Rusia- que todavía no han terminado de perderse en el Donbás. Si la operación militar rusa transcurre despacio, es porque esos neonazis se escudan en la población civil, tomada de rehén, y porque las tropas rusas buscan desalojar a las ucranianas afectando lo menos posible a los civiles.

     El asunto se extiende cuando, para variar, coinciden "demócratas liberales" y progresistas como los presidentes de Argentina y de Chile, Alberto Fernández y Gabriel Boric, respectivamente, que acaban de solidarizarse automáticamente con lo que les pareció causa justa, el mandatario ucraniano Volodímir Zelenski, apto para recibir ayuda de estos conosureños que no parecen tener siquiera un sistema de información que les permita detectar a qué clase de gente ayudan, al menos que, como otros, estén simplemente aplicando un esquema o modelo al margen de la realidad.

      Es llamativa la manera en que los "demócratas liberales" son incapaces de reconstituir hechos y dar buenas pruebas: tal vez sea lo propio de países con la idea de justicia algo torcida. En el sistema capitalista todo es posible, y en particular reconocer al otro, la alteridad, el derecho a la diferencia o temas por el estilo, pero la verdadera diferencia, en el derecho a la contradicción, es imposible. Así las cosas, se puede pasar por alto que gobiernos agredidos por Estados Unidos son víctimas del imperialismo: desde la Federación Rusa, que es el país más sancionado del mundo, hasta pequeños como Cuba, pese al repudio internacional generalizado contra el bloqueo, o como Nicaragua. Decirlo no es manejarse con simplismo binario y de caricaturas de "buenos" y "malos": Cuba tiene problemas endógenos que no se pueden atribuir todos al acoso del imperialismo, y en Nicaragua tal vez no sea de lo más formidable la personalización del poder en Daniel Ortega y la vicepresidente extravagante Rosario Murillo.

     A pesar de las sanciones, estos países suelen tan mal que bien salir adelante. Después del "golpe blando" fallido de 2018, Nicaragua se ha recuperado.. Hubo en ese momento participación de los mayores capitales nicaraguenses para financiar los "tranques" (bloqueos de carreteras).  El Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) le apostó al derrumbe de la economía, retirando de la banca privada todo el dinero posible, contribuyendo a la quiebra de tres mil micro y pequeñas/medianas  empresas y a pedir la cancelación de préstamos internacionales. Se acosó a los trabajadores del Estado y se contribuyó al despido de 200 mil de ellos. Pese a estas y otras medidas de hostigamiento, otro sector de la empresa privada (Asociación de la Promoción y la Sostenibilidad de Nicaragua, Aprodesni), que integra a 520 empresas privadas, prefirió no comulgar en el hostigamiento al sandinismo y contribuyó a que, para el año 2022, en enero Nicaragua estuviera teniendo un crecimiento económico de más del 10 %, para los fetichistas de este indicador.. Entre otras cosas, la economía nicaraguense volvió a caracterizarse por su estabilidad.

     Es desde el apoyo a Nicaragua por sus logros que quienes le dan la mano han podido denunciar a una izquierda "a la medida de Estados Unidos", lo que incluye a la mexicana presurosa de distanciarse del sandinismo actual. Ya que la llamada "izquierda democrática" pertrechada en Antonio Gramsci ama tanto a la sociedad civil, cabe destacar que, para 2020, estaban registradas en Nicaragua más de seis mil organizaciones sin fines de lucro (lo que no es exactamente lo mismo que organizaciones no gubernamentales); la Asamblea Nacional canceló la personalidad jurídica de 460, apenas el 6.8 % de las inscritas. En actos delictivos fueron detectadas 40 organizaciones. Para delinquir recibieron 20 millones de dólares del extranjero, en particular de Estados Unidos y la Unión Europea. Parte de las leyes que permitieron sancionar a un muy reducido grupo de organizaciones data de 1992 (no estaba al frente del gobierno Daniel Ortega) y otra parte de 2020, con la Ley de Regulación de Agentes Extranjeros: ¿por qué hay organizaciones que no quisieron registrarse? Cabe señalar que es un tipo de regulación que existe en Estados Unidos, Australia, Israel, El Salvador, Rusia y Hungría, por lo que habría que explicar por qué Nicaragua no puede hacer lo mismo que Estados Unidos y encima hay que solidarizarse a morir con quienes desconocen leyes similares a las estadounidenses. Un tercio de las organizaciones suspendidas estaba por lo demás sin funcionar, por lo que nadie la emprendió "contra la sociedad civil".Otras organizaciones no habían hecho más que violar sus propios estatutos. Si fuera por la familia Chamorro, Nicaragua debería operar con arreglos informales al margen de la ley y de un mínimo de patriotismo, es decir, a gusto oligárquico.

     Las universidades privadas intervenidas por el Estado no rendían cuentas de nada, como sucede impunemente en muchos países, y la Academia local de la Lengua (las Letras) estaba en el total desorden administrativo, pese a recibir 62 mil dólares anuales del gobierno. En materia de salud, las organizaciones no gubernamentales fueron respetadas y por lo demás se revelaron falsos los alarmismos sobre una supuesta incapacidad nicaraguense para hacer frente a la Covid 19.

     Las noticias de persecusión contra la Iglesia resultaron igualmente falsas. Lo que sucedió fue sobre todo que prosiguió la tendencia ya existente al cambio de congregación.

     Hay algo de los "demócratas liberales" que no está muy claro que digamos. Nicaragua no ha hecho más que endurecer medidas para proteger su soberanía nacional. Al parecer, sería algo más bien obsoleto en tiempos de globalización y de propagación de los Derechos Humanos, lo que daría pie para meterse en asuntos internos nicaraguenses. En este caso, Rusia se metió no desde luego a toda Ucrania, sino al Donbás, para proteger los Derechos Humanos de los ucranianos rusohablantes, lo que no tiene nada que ver con imperialismo y sí con algo así como la "responsabilidad de proteger". No puede estarse de acuerdo con algunos argumentos legales débiles de Rusia para entrar en territorio ucraniano, aunque lo descubierto da cuenta de que desde Ucrania se estaban preparando ataques de distinta índole contra la soberanía rusa, por lo que los rusos simplemente se adelantaron. Pero resulta que aquí sí es válido pegar reiteradamente de gritos por la "soberanía violada", lo que no cuenta para Nicaragua. Más allá de ésto, de algún modo le hacen los "demócratas liberales" para encontrarse, qué curioso, siempre del lado estadounidense y de paso de más de uno de baja ralea. Lo mejor es que el aderezo libertario lo ponga la "izquierda democrática".Todo ocurre por lo demás en "modo fraude" automático, es decir, sin considerar las pruebas -como si la ley no hubiera descubierto nunca la indagatoria- porque se llama a tomar lo dicho !por evidencia! De remate, es la clase de gente opuesta a las "ideologizaciones" y que se precia de tener algún criterio, confundido en realidad con una "firma" que se toma por marca. Que gobernantes se traguen esta oferta da cuenta de que no tienen tallas de estadistas. Desde tierras nicas (da click en el botón de reproducción).









EL BALBOA QUIERE DÓLAR

 No queda claro por qué algunos se lanzan a anunciar triunfos imposibles: como era de prever, la candidata popular Maribel Gordón obtuvo en ...