La embajadora saliente de México en el Ecuador, Raquel Serur Smeke (declarada persona no grata por el gobierno ecuatoriano), nunca tuvo ni la más mínima idea de la diplomacia, siendo docente universitaria especializada en Letras Inglesas (López Obrador la convirtió en "filósofa" que no es, y en "intelectual excepcional", que tampoco). Serur fue a extorsionar al presidente Andrés Manuel López Obrador, pidiendo la embajada, a nombre de "la amistad", que consistió en introducirle en algún momento al hoy presiente a la señora. Serur lo pidió como viuda del filósofo ecuatoriano Bolívar Echeverría, que a López Obrador en su sempiterno acomplejamiento le pareció "un luchador social" . Sabrá Dios con qué mitomanía le habrán salido el actual mandatario mexicano.
López Obrador quiso ilustrar la actuación de los medios de comunicación en las últimas elecciones ecuatorianas: no hubo mucha precisión, pero luego el mandatario enmendó y explicó muy bien. Para entender el asunto, hay que pasar por la siguiente canción nicaraguense (de Luis Enrique Mejía Godoy), inspirada en un poema de Tomás Borge (extinto comandante sandinista), cantada alguna vez por el grupo ecuatoriano Pueblo Nuevo y que la RC-5 (Revolución Ciudadana, de Luisa González y a la que es afín el ex presidente Rafael Correa) utilizó en la campaña presidencial:
El candidato Fernando Villavicencio, agente estadounidense denunciado como tal en una publicación ecuatoriana de Jaime Galarza (La CIA contra América Latina. Capítulo: Ecuador), se pasó buena parte de su vida atacando a Correa. Villavicencio fue asesinado en plena campaña y he aquí lo que hicieron los medios: se aprovecharon de la canción para sugerir que la ejecución había sido obra del correísmo, lo que disminuyó la clara ventaja de Luisa González. Hasta la fecha, el gobierno ecuatoriano no ha aclarado nada de la autoría intelectual del asesinato. Como sea, el gobierno de Daniel Noboa tomó a mal lo dicho por López Obrador y Serur salió volando, aunque lo cierto es que el mandatario mexicano en nada se inmiscuyó en los asuntos actuales del Ecuador ni con el gobierno de Noboa.
Noboa ha logrado una disminución tan drástica de los homicidios, gracias a los militares en las calles, que tiene un 80 % de popularidad -las próximas elecciones son en 2025- y a los delincuentes dedicados ahora a hacer subir los índices de extorsión y de secuestro. Seguramente coronar la cereza del pastel incluya algún nuevo invento contra Correa o alguien más de la RC-5. Asilado en Bélgica, Correa no ha podido ser extraditado al Ecuador porque las instancias internacionales consideran algo así como ridículas las ocurrencias de la "Justicia ecuatoriana".
Queda por saber si Serur es el verdadero tema, ya que desde hace buen rato está en la embajada mexicana en Quito, capital ecuatoriana, el ex vicepresidente Jorge Glas, de la RC-5, un ser humano de gran calidad y de excelente desempeño en el gobierno de Correa. Glas, encarcelado por cinco años por algo que se reveló totalmente falso, estaba siendo víctima de otra fabricación de un aparato de "Justicia" que parece considerar la dignidad de unos como un atentado terrorista al servilismo de otros, algo no tan raro en los hábitos señoriales de la sierra ecuatoriana. Cansado de tanto invento y de tratar de recuperar el buen nombre al que tiene derecho, Glas escogió meterse en la embajada de México y solicitar asilo, lo que estaba en estudio. Ecuador, que considera la dignidad como delito, había solicitado capturar a Glas, pero México se negó por inmunidad diplomática. Finalmente, a las pocas horas de la salida de Serur, la cancillería mexicana, con la excelente canciller Alicia Bárcena, mostró haber entendido muy bien el engaño ecuatoriano y le concedió el asilo a Glas, sin que con ello se termine el problema, puesto que el Ecuador se niega a otorgar el salvoconducto para que Glas pueda salir. Además de dos o tres personas más, en México está asilado otro hombre inteligente que fuera ministro de Exteriores de Correa, Ricardo Patiño, igualmente guayaquileño. Es según cómo evolucione la situación de Glas que podrá saberse el fin de una provocación del gobierno de Noboa en la que México no cayó, al no querer romper relaciones. En la prensa mexicana recogida en la Web se argumentó que Serur informaba regularmente a México de lo que ocurría con Glas. México encontró la respuesta adecuada, a reserva de lo que siga, mientras se va de vuelta a la pirekua (da click en el botón de reproducción)